Mascarillas y alimentos
Las iniciativas de los miembros y empresas amigas de la Orden de San Lázaro siguen multiplicándose y lo hacen en dos de las mayores necesidades del momento, mascarillas y alimentos.
La empresa de Aprovechamiento textil AIPTESA de León ha donado 300 mascarillas y las han enviado a la Cancillería desde donde serán distribuidas a los centros en los que más se está necesitando la ayuda.

Otras 300 mascarillas han sido donadas y repartidas por el propio caballero de la Orden Luis Miguel Gómez Matarín. En primer lugar a las hermanas dominicas del Monasterio de Santo Domingo el Real, donde tiene su sede la Cancillería de la Orden de San Lázaro de Jerusalén y con las que se tiene un vínculo especial.

También se han repartido las mascarillas en la Residencia de estudiantes Anunciata, especializada en opositoras, atendidas por la congregación de las Dominicas, en La Hermandad del Refugio en la Corredera Baja de San Pablo y en la fraternidad de frailes franciscanos de San Fermín de los Navarros.

También el caballero de la Orden, Antonio Rodríguez Holguín, ha aportado 75 kilos de legumbres, 40 kilos de patatas y 25 litros de aceite. Esta aportación ha salido de forma inminente de la Fundación ante la necesidad acuciante de las entidades con las que la Orden colabora habitualmente, en este caso han sido El Refugio y la Real Congregación de San Fermín de los Navarros.
Esperamos que las siguientes entregas de material empiecen a formar parte de la campaña Comer es lo primero que se está preparando para crear el banco de alimentos de la Fundación San Lázaro.